El sentido espiritual de la pandemia por Coronavirus (1ªparte)

Introducción

Desde principios de 2020, la humanidad al completo se encuentra atravesando una importante crisis sanitaria. En nuestra historia reciente, es la primera vez que nos enfrentamos juntos, sin ningún tipo de excepción, a una prueba colectiva de este tipo. A nivel físico hemos escuchado todo tipo de teorías y explicaciones sobre su origen y resolución. Sin embargo, si nos quedamos únicamente en este ámbito perderemos por completo el auténtico significado de lo que está sucediendo.

A lo largo de este artículo vamos a hablar en profundidad del sentido espiritual que la actual pandemia por Coronavirus tiene. Para ello, veremos por primera vez algunos temas de carácter espiritual de los que no hemos hablado antes ni suelen tratarse abiertamente.

La planificación de vida en el mundo espiritual

Para poder entender lo que nos está sucediendo en la actualidad, tenemos que ir hasta el mundo espiritual.

Hemos visto en diferentes ocasiones que, tras la muerte, accedemos directamente al plano astral, un lugar destinado a liberarnos de las cargas emocionales y los apegos que hemos adquirido durante nuestra vida en la Tierra. Una vez que logramos dejar todo eso atrás, nos dirigimos entonces al siguiente plano de existencia, llamado “mundo espiritual” o “plano mental”. Este es nuestro auténtico hogar espiritual mientras estemos en el ciclo de reencarnaciones, de modo que es allí donde vamos finalmente tras la muerte y desde donde volveremos a reencarnar en la Tierra.

Como vimos en “Una vida infinita”, el tiempo que pasamos en el mundo espiritual lo destinamos a multitud de tareas: estar con nuestra familia de almas, aprender, compartir experiencias vividas, trabajar para nuestra propia evolución, ayudar a otras almas o seres encarnados… y entre estas tareas, la que más nos importa ahora es la de planificar nuestra siguiente vida física.

Cuando va llegando el momento de reencarnar, nos reunimos con Guías y Sabios para analizar todo aquello que queremos o necesitamos aprender en nuestra próxima vida en la Tierra. Durante ese análisis, repasamos también nuestras vidas pasadas para ver los aprendizajes que quedaron pendientes y son necesarios retomar ahora. Tras estas sesiones y con toda la información que recopilamos allí, comenzamos la planificación de nuestra vida en la Tierra. Es en este momento donde elegiremos las situaciones que vamos a experimentar como seres humanos, las personas con las que nos encontraremos (padres, parejas, hermanos, amigos, enemigos…), los trabajos que realizaremos y cualquier otro detalle que sea relevante para nuestra tarea y misión en el mundo físico.

Hasta aquí es la parte de la que se habla habitualmente en cuanto a planificación de vida. Sin embargo, hay un aspecto clave para comprender el tema que estamos tratando: la planificación de escenarios y situaciones globales. Nuestro objetivo principal como almas es siempre el de evolucionar a través del aprendizaje que nos proporciona la experiencia. Y en eso nos basamos para planificar la vida. No queda nada al azar, y eso incluye las crisis globales.

Cuando encarnamos en la Tierra, lo hacemos dentro de una época histórica concreta, y en esas épocas pueden producirse acontecimientos importantes como el que estamos experimentando ahora. ¿Cómo encaja nuestro plan de vida individual con una situación global como esta pandemia? ¿Qué relación tiene eso contigo y por qué lo estás viviendo?

La planificación de experiencias globales

Existen almas con una gran evolución que ya no necesitan encarnar en la Tierra y que, sin embargo, lo hacen para colaborar en proyectos espirituales especiales. Cuando en regresiones o sesiones de Darshanum (expansión de consciencia) encontramos este tipo de almas, los conocimientos que transmiten durante su estado de hipnosis resultan especialmente reveladores, ya que como almas no proceden del mundo espiritual habitual (el plano mental inferior), sino que vienen de planos más elevados.

A principios de 2019, un año antes del inicio de la pandemia, se puso en contacto conmigo un hombre llamado Víctor para realizar una sesión de Darshanum. Nunca se había interesado por la postvida ni había leído nada al respecto, pero como sucede habitualmente, tras la muerte de un ser querido muy cercano le habían surgido inquietudes. Desde la primera sesión pudo acceder a lugares espirituales de alta vibración a los que pertenecía como alma, y desde allí fuimos explorando su vida espiritual y los trabajos que se realizan en esas zonas. La información que hemos ido recabando a lo largo de las sesiones ha resultado ser especialmente reveladora en varios ámbitos, especialmente del que estamos hablando en este artículo.

A continuación, os comparto un fragmento de la sesión de Darshanum de Víctor en el que podemos ver cómo están planificadas las situaciones globales. Para entender bien este fragmento, debemos tener en cuenta que Víctor no está yendo a un recuerdo del pasado, como sucede en las regresiones, sino que está accediendo en directo a ese espacio. Aunque para él, como alma, ese es su lugar de vida y de trabajo, en su actual vida física no sabía ni reconocía nada de este lugar, por lo que va necesitando tiempo y símbolos que le ayuden a entender.

[Víctor] He llegado a una sala grande. Hay una mesa en el centro rodeada por unos sillones… Tengo que parar y apoyarme por aquí, todo se mueve mucho todavía y me estoy mareando [los mareos son algo frecuente cuando se llega a un plano cuya vibración es muy diferente a la que el paciente tiene físicamente].

[Joaquín] Muy bien, permanece ahí tranquilo hasta que tu vibración se adapte a la de ese lugar.

Se va parando todo… ya no se mueve tanto. Ha aparecido una persona que me está mirando. Me resulta muy familiar… me dice que es mi Guía. Quiere que siga calmado hasta que el lugar deje de moverse.

¿Qué aspecto ha tomado tu Guía, qué apariencia tiene?

Es un hombre mayor, con barba… con una nariz gruesa. Lleva un sombrero largo, cónico. No le veo los pies, no tiene pies. Lleva puesta una túnica muy sencilla blanca y púrpura y un bastón de madera. Me está tendiendo la mano para que la coja, para darme confianza y que esté más sereno y confiado.

Muy bien. Cuando puedas, hazle caso y dale la mano. Déjate ir con él y cuéntame qué sucede.

Nos hemos sentado alrededor de la mesa, en esos sillones. En la mesa hay un libro muy grande, es enorme, muy antiguo. Mi Guía me dice que ese libro me lo ha traído él para recordar y me explica que yo debería saber lo que es. Está abriendo el libro y me lo enseña. Me señala unas hojas del libro y me dice “este libro lo has escrito tú, aunque todavía no lo recuerdes”. No entiendo a qué se refiere…

No te preocupes, es normal que aún no entiendas lo que está pasando. Continúa prestando atención a tu Guía para que poco a poco vayas comprendiendo. Cuéntame qué va sucediendo.

Ha cogido su bastón… y con él está proyectando imágenes de lo que está escrito en el libro. Está proyectándome las Torres Gemelas de Estados Unidos… el momento del ataque. No entiendo esto qué es… y se lo digo. Él me mira, me sonríe y vuelve a señalar el libro. Me dice: “Está aquí, lo escribisteis aquí”.

Pregúntale a tu Guía si ese libro existe en el plano físico o no.

Me dice que no, ni está ni puede estar. Este libro pertenece a este lugar, lo hemos escrito aquí. Estoy tocando ahora el libro… es una pasada… ahora sí siento que este libro es mío… no lo entiendo, pero al tocar el libro estoy en una paz muy grande… El Guía dice que al llegar a la Tierra lo olvidé todo, pero que ahora puedo recordar. Siento una paz indescriptible.

Muy bien. Permanece sintiendo esa paz, atento a lo que vayáis haciendo a continuación.

Ahora he abierto el libro, pero no entiendo lo que pone. Está escrito en unos símbolos muy extraños.

No trates de leerlo. Probablemente no está escrito para la mente física. Observa en cambio lo que el libro puede estar transmitiéndote directamente cuando lo miras.

Vale, al mirarlo me llegan imágenes raras, y no entiendo…

Aunque no las entiendas, descríbemelas.

Veo un submarino en el fondo del mar que no funciona, y mientras lo miro mi Guía dice: “escrito”. Ahora veo gente en cruces… Y el Guía dice: “escrito”. Veo mucho fuego, un gran incendio, “escrito”. No son cosas bonitas, ninguna es bonita…

¿Qué tienen en común esas escenas?

Son catástrofes. Y mi Guía me dice que está escrito, que todas esas situaciones están en el libro. No son cosas bonitas, sin embargo, el libro es bonito. Y el Guía me dice que es la vida. “Tienes que entender”, me dice. Y da golpes en el suelo con el bastón. Todo está empezando a moverse mucho ahora, tengo que parar… [Aquí vuelve a aumentar su nivel de vibración al expandir su consciencia hacia niveles más altos].

De acuerdo, no te preocupes. Párate sin prisa hasta que tu vibración se adapte nuevamente y cuando puedas dime lo que sucede.

Hemos subido. Estamos en un suelo de cristal, pero no se rompe. Mi Guía y yo ahora vamos vestidos iguales. Llevamos un bastón cada uno, la misma túnica… estamos iguales. Este lugar es precioso… de nuevo el libro está en el centro, pero ahora está girando, ¡y del libro se proyecta todo!, todas las imágenes que he visto antes, y muchas más… ¡está todo proyectándose, como un torbellino de imágenes! Y estamos alrededor él y yo, mirando esas historias. Y él me repite “está todo, y lo has escrito tú. Lo tienes que entender”. Pero yo no lo entiendo…

Permanece ahí calmado, sin esforzarte en nada. Poco a poco el entendimiento irá llegando. Descríbeme cómo se muestran exactamente esas imágenes, de qué modo se proyectan.

Es algo muy raro… son como cristales, hojas transparentes, vidrios… no sabría definirlo. Es delicado, pero no se rompe. Y yo muevo la mano, cojo una de esas escenas, la miro y la guardo ahí mismo. Hay cosas muy extrañas que no entiendo.

Aunque no las entiendas, ve diciéndomelas.

Veo una gran construcción ardiendo [me explica cuál es esa construcción], pero esto no ha pasado todavía, así que no se puede revelar… el Guía me explica que eso va a pasar, que ya está escrito. Ahora veo una nave espacial… pero el Guía me insiste en que no hable de esto tampoco [ni siquiera lo habla conmigo]. Ahora veo la isla de Pascua, están construyendo las figuras usando escaleras, cuerdas… es apasionante. Ahora veo la construcción de la torre Eiffel…

¿Qué te transmite todo eso que estás viendo? ¿Qué conexión tienen entre sí todas estas escenas?

Lo puedo ver todo, lo puedo saber todo. Está en el libro. El pasado, el presente, el futuro… todos los acontecimientos están aquí.

Pregúntale a tu Guía si tu trabajo en el mundo espiritual está relacionado con esto que estás viendo. Y si es así, en qué modo participas tú de todo esto.

El Guía me señala el libro con el bastón y me dice que yo lo he escrito. Soy el que lo escribe, no el que lo ejecuta. Yo lo escribo y lo archivo, lo guardo. Ahora el Guía ha cerrado el libro y salimos de ese lugar.

¿Y qué estáis haciendo ahora?

Estamos caminando hacia algún sitio y me va hablando. Me dice que yo no debería haber olvidado todo esto cuando reencarné. Me explica que cuando las almas venimos de planos altos a cumplir tareas globales, debemos recordar esas tareas espirituales. Sin embargo, algo falló en mi caso y la olvidé. Esto le preocupa porque parece ser que hay muchas más almas como yo, encarnadas ahora en la Tierra, que deberían estar recordando su tarea y tampoco lo están haciendo. Ahora estamos entrando en otro lugar.

Cuéntame cómo es ese lugar al que acabáis de entrar.

Es una sala muy grande y de nuevo hay una mesa en el centro. El libro está encima de ella. Alrededor hay muchos seres sentados, y nosotros nos sentamos allí también. ¡Somos muchos los que estamos en esto, no soy yo solo! Estoy empezando a sentir mucha presión en el cuerpo… hay mucha energía. En esta mesa hay alguien que manda mucho, una energía muy potente… y yo no puedo tolerar esta energía… es muy grande para mí. Me están sacando de este sitio. El Guía me explica que no pasa nada, es solo que no vibro todavía todo lo alto que algunas de estas presencias requieren […]
Aunque ahora no puedas estar en esa reunión, ya sabemos que has estado ahí en otras ocasiones, de modo que tienes esos recuerdos como alma. Vayamos a ellos […] Explícame ahora quiénes son los seres que están en esa reunión con el libro.

Hay una bola muy grande a la que no consigo darle forma, como de masa concentrada, opaca, muy fuerte. Esa bola es como un agujero negro. Tiene tanta concentración que no se ve nada a través de ella. No es mala en absoluto, todo lo contrario, es “creación”. Esa bola es la que creadora. Y después hay gente más pequeña, como mi Guía o yo. Somos muchos.

¿Y qué hacéis en esa reunión?

Tenemos muchas cosas delante. Son como pantallas, pero no son pantallas. Vemos muchas cosas, muchas escenas, escenarios, situaciones de la Tierra… debatimos durante largo tiempo, y decidimos entre todos. Y una vez que hemos decidido, esa bola de energía las crea. Esa bola es mucho… Ella manda, nosotros decidimos y ella crea. Esa bola es un Ser… es imposible de describir.

¿Y sobre qué decidís en esas reuniones?

Sobre la vida. Sobre los acontecimientos globales que se producen en la vida. Todo se crea. Las situaciones, los sucesos… ahora estoy viendo un río, una montaña, un búho… todo está creado.

¿Y decidís solo sobre la vida en la Tierra, o también sobre la vida en otros lugares?

Yo no. Yo soy Tierra. Hay otros como yo que trabajan en otras tierras, pero yo no.

Muy bien. Hagamos ahora un resumen de tu trabajo en ese lugar espiritual. Tú, entonces, ¿te dedicas a colaborar en la creación de situaciones y eventos de la Tierra?

Más o menos. Es importante que esto esté claro. Yo trabajo escribiendo situaciones y acontecimientos globales que puedan pasar en la Tierra. Todos los que estamos aquí nos dedicamos a esto. Después de haber escrito estos acontecimientos, debatimos entre todos cuáles serán los más indicados, los más útiles, los más necesarios. Y una vez que hemos decidido cuáles serán, entonces ese Ser [al que antes llamó “bola de energía”] es quien los crea. Nosotros planificamos. Y ese Ser los crea.

De acuerdo, está claro.
Y todo lo que escribimos y sucede se va registrando en el libro. Mi tarea también es llevar ese registro. Hacemos ambas cosas. En este lugar no hay tiempo, de manera que en el libro no hay diferencia entre pasado, presente o futuro. Lo que pasa está escrito en el libro. Sea cuando sea que pase en el tiempo cronológico de la Tierra.

¿Te gusta este trabajo?

Sí, porque lo sabes todo. Lo tienes todo. Es apasionante, es bonito. Sin embargo, hay una parte, cuando se trata de la creación de situaciones catastróficas, que es dolorosa y se hace difícil. Aunque sabemos los motivos, aunque aquí comprendemos que todo es para bien, es inevitable que a veces nos resulte especialmente doloroso.

¿Llevas mucho tiempo haciendo este trabajo?

Sí, muchísimo tiempo… pero aquí no hay tiempo como en la Tierra. Siempre ha habido gente haciendo este trabajo. Mi Guía también hacía este trabajo antes que yo…

Experiencias globales y planes individuales

Hasta aquí, hemos podido ver cómo es el proceso por el cual se generan las situaciones y eventos globales desde los planos espirituales superiores y cómo se proyectarán después en la Tierra. Ahora, a través de este fragmento de otra sesión de Víctor, vamos a seguir profundizando en este aspecto para poder descubrir la relación entre estas experiencias globales y los planes individuales que cada uno de nosotros tenemos como almas.

[Joaquín] Tengo más o menos claro el proceso que has descrito y tu labor en esta tarea. Lo que me gustaría saber ahora es por qué hay almas que viven determinados acontecimientos globales, de qué modo encajan esos acontecimientos en sus planes de vida individuales.

[Víctor] Cuando nosotros escribimos un escenario [se refiere a una situación global para la Tierra], ese Ser [la bola de energía] la crea desde aquí y la envía a los planos inferiores [se refiere al plano mental]. Una vez que ese escenario está en los planos inferiores, las almas pueden inscribirse a esa experiencia si consideran que va a resultarles de ayuda para su plan individual. Las que deciden vivir esa experiencia en la Tierra, reencarnaran en el momento adecuado para poder vivirla y que les ayude así en su plan individual.

De acuerdo.

Hay ocasiones en las que planificamos escenarios que ningún alma quiere experimentar en la Tierra. Cuando esto sucede, la situación global no se llega a producir, puesto que no hay nadie interesado en ella.

¿Habéis planificado eventos en la Tierra que no se han producido por falta de interés de las almas?

Correcto. Todos los acontecimientos globales se planifican con la intención de que sean útiles a la evolución de las almas encarnadas en la Tierra. Si desde el mundo espiritual no hay almas suficientes interesadas en esa experiencia, se descarta o se modifica. No pasa nada, es algo normal.

Con esto queda bastante claro cómo es el proceso que seguimos como almas para experimentar las situaciones globales en la Tierra. Cuando nosotros, como almas, nos encontramos planificando nuestra vida física, revisamos los eventos o acontecimientos globales que hay disponibles y, si alguno de ellos nos es útil para ayudar en nuestra evolución, nos adherimos a él.

Estas sesiones con Víctor se produjeron antes del inicio de la pandemia por Coronavirus. Cuando estalló la alerta sanitaria, recordé lo que habíamos encontrado en estas sesiones y supuse que se trataba de lo mismo. Durante el primer confinamiento, Víctor volvió a realizarse una sesión de Darshanum, por lo que aprovechamos para conocer si esta situación pandémica era igual a la de cualquier otra catástrofe. Aunque en líneas generales sí era una situación similar a las demás, encontramos otros aspectos sorprendentes que no esperábamos.

Pulsa aquí para leer la SEGUNDA PARTE de este artículo.